Origen: Viaje Entre Dimensiones - Chapter 104
“¿Donde crees que Cloud-sama podría estar?” – preguntó Cecilia mientras miraba a su amiga de cabello castaño.
“No lo sé” – negó Houki.
“¿No podrías preguntarle a tu hermana?” – preguntó Ichika con calma – “Tú me dijiste que ellos salieron a una cita a pesar de lo extraño que suena”
Él comprendía que esos dos no eran la mejor combinación pero si salieron juntos, al menos eso significaba que no se odiaban tanto como ellos decían.
“Ella no me ha contestado mis llamadas” – suspiró la chica de Japón.
“¡¿Enserio?!” – exclamó Ichika. Sinceramente, él nunca pensó que un día como este llegaría porque sabía lo mucho que Tabane mimaba a su amiga de la infancia.
“Me siento extraña al ser ignorada por Onee-chan…” – murmuró Houki – “Supongo que así es como ella se siente…”
“Estoy seguro de que Tabane-sama solo necesita un poco de tiempo” – dijo Cecilia con una sonrisa mientras intentaba consolar a su hermana.
“Eso espero…” – murmuró Houki mientras suspiraba con pesar.
“Por cierto… ¿por qué no sales de ese escondite, Charlotte Dunois?” – preguntó Cecilia cuando notó como una silueta los seguía.
“¡Kya!” – Charlotte solo los miró con vergüenza al escuchar que la habían descubierto – “¿T-Tan obvio fue?”
“Déjame decirte que hasta un novato que recién inició su entrenamiento, puede hacer un mejor trabajo como espía” – dijo Laura mientras aparecía desde otro lugar.
Los presentes fruncieron el ceño cuando vieron a la representante de Alemania aparecer porque sinceramente, ninguno de ellos tenía una buena impresión de la chica.
“Puedo sentir sus miradas llenas de emociones negativas, aunque sinceramente no me importa” – Laura solo mantuvo su expresión neutral – “Hoy no vine a meterme con ustedes, sino que vine por él”
“¿Yo?” – Ichika se sorprendió de que la chica de cabello plateado lo estuviera buscando.
“Sí…” – asintió Laura – “Hoy vine a ver que tipo de hermano tiene la Instructora Orimura… y sinceramente estoy decepcionada…”
“. . .” – la ceja de Ichika empezó a temblar porque nunca pensó escuchar ese tipo de palabras.
“Sinceramente, esperaba algo más del hermano de la Primera Brunhilde, así como el primer hombre capaz de pilotear un IS” – continuó la chica de Alemania – “Pero mi primera impresión es que eres un idiota que solo pilotea por suerte… incluso es posible que sea un error de configuración en la programación hecha por Tabane Shinonono…”
Las palabras de Laura eran hirientes pero Ichika tenía que admitir que algunas de ellas si eran ciertas. Él tuvo suerte de poder pilotear un IS cuando entró por error a una de las salas de prueba, después de todo, él solo había ido a ese lugar para darle un poco de apoyo a Houki.
“Creo que hablaste de más, Laura Bodewig” – dijo Cecilia con furia – “Puede que Ichika-san sea un novato pero él tiene talento…”
“El talento solo sirve cuando la persona que lo tiene… está todavía con vida” – dijo Laura con frialdad mientras invocaba el arma de su IS – “Ahora veamos si esta pequeña planta es capaz de sobrevivir el frío invierno alemán… demuestra que eres digno de ser el hermano menor de Chifuyu Orimura… porque si no, entonces morirás y ella no tendrá razón para quedarse en este lugar desaprovechando su talento con niñas que solo piensan que esto es una especie de juego”
“Creo que ya atacaste nuestro honor más que suficiente, Laura Bodewig” – dijo Cecilia con frialdad mientras invocaba su rifle de asalto – “Es hora de bajarte de esa nube de superioridad”
“Concuerdo con Cecilia-san…” – dijo Charlotte – “Es tiempo de que comprendas de que tu nación llena de megalómanos, no es el país más fuerte, ni tampoco lo son sus IS”
La mirada de Laura volvió glacial cuando escuchó el insulto de la chica de Francia. Si había algo que ella odiaba más en el mundo, era que le restregaran los errores que su país tuvo en el pasado.
“Creo que ya es suficiente” – dijo Tatenashi mientras aparecía en el lugar – “Como Presidenta del Consejo Estudiantil, no puedo permitir que destruyan la Academia, sin contar que Orimura sensei aquí presente, no le gustaría eso… ¿verdad?”
Chifuyu no dijo nada, solo caminó hacia donde estaban las chicas – “Esperaba un poco más de ustedes porque son Representantes… pero veo que solo son niñas que no comprenden bien la situación en la que están así que voy a dejárselas un poco más claro… Ustedes no solo son cadetes en entrenamiento en esta institución, también son las que representan las voluntades de sus naciones, eso significa que si una de ustedes ataca a otra, es una declaración de guerra contra esa nación”
“!” – las chicas se sorprendieron cuando escucharon esto.
“Ese es su deber cuando fueron nombradas como representantes, el representar a sus naciones ante el mundo, así que será mejor que piensen mejor sus acciones antes de actuar” – continuó la profesora – “Eso va también para ti, Bodewig”
“. . .” – Laura guardó silencio pero aún así asintió. Ella tomaba en cuenta las palabras de su instructora porque sabía que ella estaba siempre en lo correcto.
“Ahora… si quieren pelear, entonces van a tener que hacerlo en la Arena de Combate… ahí podrán pelear sin contenerse pero bajo las mismas reglas que da la Academia” – dijo Chifuyu con seriedad – “En cuanto a ti, Orimura”
“¿Chifuyu Nee?” – preguntó Ichika con sorpresa, solo para ser golpeado en la cabeza por un cuaderno – “Cuando estoy trabajando, es Orimura sensei… ¿quedó claro?”
“Hai…” – murmuró Ichika mientras se sobaba la cabeza.
“Tu entrenamiento será diez veces peor para poder compensar el poco tiempo que llevas entrenando” – dijo Chifuyu con seriedad – “Pueden retirarse…”
“¡Espere!” – dijo Houki – “¿Usted sabe donde está Cloud-sama?”
“¿Cloud?” – dijo la profesora – “Él… él está en una misión secreta en la que no puede ser contactado por nadie”
“. . .” – las chicas quedaron en silencio mientras la curiosidad cada vez se hacía más grande. Ellas ahora querían saber en que tipo de peligrosa misión, él estaría.
Y Cloud sí que estaba pasando por un momento peligroso…
“¿Quieres que te haga un masaje?” – preguntó Squall, quien estaba usando un pequeño bikini rojo a penas podía ocultar sus maravillosas curvas.
“. . .” – Cloud solo guardó silencio mientras cerraba los ojos. Él tenía que admitir que ella era hermosa y no ayudaba que no había tenido nada de acción desde que llegó a este mundo.
“¿Sucede algo?” – preguntó Squall mientras ronroneaba seductoramente.
“Creo que ya te divertiste lo suficiente” – dijo Cloud con seriedad – “Estoy seguro de que no me invitaste a este lugar solo para que disfrutara de la vista”
“¿Eso significa que te gusta?” – dijo Squall mientras se inclinaba ligeramente, mostrando aún más su prominentes curvas.
“Mentiría si dijera que no” – asintió el rubio – “Pero eso no cambia el hecho de que esto es un poco extraño”
“¿Qué tiene de extraño?” – preguntó la líder de Phantom Task – “Yo deseo que seas mío y es por eso que te estoy seduciendo”
“Creo que es tiempo de que sigamos con nuestras sesión de preguntas y respuestas” – dijo Cloud con seriedad.
“Ok” – asintió Squall.
“¿Qué es realmente Phantom Task?” – preguntó el profesor rubio.
“¿Ho~? No esperaba ese tipo de preguntas” – dijo Squall con sorpresa – “Sinceramente, yo pensaba que preguntarías algo relacionado a M”
“Eso puede esperar, tengo todo el tiempo del mundo para conseguir ese tipo de información, incluso podría preguntárselo yo mismo” – respondió Cloud con calma – “Pero tú… tú eres completamente diferente. Puedes engañar a los demás con esa actitud despreocupada y seductora, pero yo puedo ver como eres realmente”
“Interesante…” – sonrió Squall mientras su actitud cambiaba completamente. La presencia seductora aún estaba presente paro ahora había algo más en el rostro de la mujer, ella ahora era fría, calculadora y más que nada, podía notarse una gran cantidad de deseo en su mirada, pero no uno lujurioso. Lo que ella deseaba, era poder, un poder absoluto que pudiera someter cualquier cosa, un poder fuera de este mundo, un poder que estaba en las manos del hombre que tenía en frente y que ella conseguiría sin importar que tenga que hacer o las consecuencias.
“¿Cuantas personas te han visto así?” – preguntó Cloud con curiosidad. Él por fin se sentía un poco más a gusto en este lugar ahora que la mujer estaba mostrando su verdadero rostro.
“Solo dos personas” – respondió Squall con frialdad – “Y tú eres uno de ellos”
“¿Quién es el otro?” – preguntó el profesor rubio – “¿Tu novia?”
“No” – negó la rubia americana – “Autumn no sabe como soy realmente… la otra persona es mi padre, la persona que me metió en esta organización”
“Interesante…” – sonrió el rubio – “Ahora… ¿qué tal si hablamos correctamente?”
“Me parece bien… pero esta vez… ya no jugaré más” – dijo Squall mientras sus ojos rojos miraban directamente a los ojos azules del hombre que tenía en frente – “Bienvenido a la Isla XX de Phantom Task… Sephiroth… mi nombre es Squall Meusel, alias Inferno, la Reina Carmesí… es un placer hablar contigo frente a frente”