Origen: Viaje Entre Dimensiones - Chapter 70
Cloud ahora estaba vistiendo un traje de negocios color negro como el de los “Turcos” del juego Final Fantasy 7 junto a un hermosa Magatama roja como la sangre como pendiente en su oreja izquierda. Esta no era otra que el objeto “Nobunaga no Magatama”.
El joven rubio estaba revisando los últimos informes que tenía, después de todo hoy regresaba Amami junto a las tropas de su viaje de soporte para las demás zonas de la región.
La investigación sobre el infectado original por fin estaba dando frutos aunque la cura ahora solo funcionaba con personas que habían sido infectadas en menos de una hora.
Cloud tenía una mirada tranquila en su rostro porque mañana era el día donde su estadía en este mundo terminaría.
Él había estado pensando en diferentes formas de abordar el tema con las chicas y comprendía que ellas estarían escépticas, al menos así estarían Saya, Rei, Yuriko y Kyoko.
Shizuka, Rika, Saeko y Miku no durarían en seguirlo de eso estaba seguro pero las demás él no estaba seguro aunque tenía la esperanza de que lo hicieran, aunque él no las culparía si querían quedarse. Cloud igualmente podría venir a visitarlas si esto sucediera, aunque los sentimientos poco a poco empezarían a debilitarse, no para ellas ya que el tiempo solo sería de un día, sino para él.
Uno podía decir que tendría a esa persona especial en su corazón sin importar la distancia pero el tiempo solo es el que dirá si esto era verdadero o no, después de todo, la distancia es uno de los más grandes enemigos de una relación, más si esta es una distancia entre dimensiones.
Cloud sacudió su cabeza mientras dejaba estos pensamientos a un lado, él mantenía la esperanza de que todas los seguirían.
* * * * * * * *
Habían pasado pocas horas y Amami por fin había vuelto a la ciudad.
Como líder, Cloud fue a recibirlos y hablar un tiempo con el viejo soldado.
Amami estaba sorprendido de lo eficiente que había sido el joven rubio al manejar la cuidad, más cuando vio que todo había vuelto a ser como antes del brote del virus pero se sorprendió aún más cuando escuchó que le estaban entregando el control total de la ciudad.
Luego de entregarle el poder al viejo general, Cloud fue en dirección donde antes estaba la mansión Takagi a despedirse de su hermano mayor Souichiro y a disculparse una vez más por todo lo que había sucedido con Yuriko y Saya. Este lugar había cambiado desde que ellos se fueron porque Cloud había convertido la zona en un parque, uno que tenía la estatua del viejo líder Yukuza para recordar todo lo que había hecho por los sobrevivientes.
“Sabía que te encontraría aquí” – dijo Yuriko mientras miraba la estatua de su fallecido esposo y al igual que el rubio, se disculpó por sus acciones aunque no se arrepentía. Desde que inició una relación con el chico, ella era mucho más feliz.
“Solo me venía a despedir” – sonrió el rubio.
“¿Despedir?” – preguntó Yuriko con el ceño fruncido. Que ella supiese, él no tenía una enfermedad terminal ni tampoco estaba cerca de la muerte.
“Lo explicaré mañana” – dicho eso, Cloud caminó en dirección desconocida.
Yuriko frunció aún más el ceño al escuchar las palabras del rubio, así que decidió hablar con las demás para que juntas hicieran hablar al chico pero para molestia de ellas, él no apareció en todo lo que quedaba del día.
* * * * * * * *
Ya era de mañana nuevamente y los sobrevivientes de la catástrofe estaban empezando a levantarse para iniciar un nuevo día de trabajo. Todavía no se alcanzaba una buena estabilidad económica pero al menos el comercio así como el trabajo, iban en el buen camino.
Todas las chicas estaban reunidas en la oficina del rubio esperando a que volviera pero mientras más pasaba el tiempo, mayor era la molestia de ellas.
“¡¿Donde está ese idiota?!” – rugió Saya con el ceño fruncido al ver que el rubio no había llegado en toda la noche.
“No lo se” – negó Rei con molestia – “Pero está actuando demasiado extraño…”
“¿A caso creen?” – murmuró Kyoko con incomodidad.
“Si estás pensando, lo que creo que estás pensando, entonces déjame decirte que no es posible” – negó la bella campeona de Kendo – “Danna-sama de alguna forma u de otra nos cuenta todo lo que hace”
“Eso vuelve más extraño su actitud actual” – agregó Yuriko con el ceño fruncido – “Él habló de una forma que parecía que iría de este mundo…”
“¡¿Dices que se va a suicidar?!” – exclamó Miku con miedo. Si el rubio se moría, ella no sabría que hacer con su vida. Él era la persona que la había ayudado a pasar por un trauma que la acompañaría por el resto de su vida.
“No…” – negó la madre pelimorada – “Era más en un sentido literal…”
“Creo que tienes un severo caso de Trastorno de Estrés Postraumático” – dijo Rika mientras le giraba los ojos.
“. . .” – Shizuka se quedó en silencio durante toda la conversación, ya que sentía que las palabras de la pelimorada no eran tan extrañas, después de todo, acaban de sobrevivir un apocalipsis de criaturas que supuestamente solo eran una fantasía.
“¿Sucede algo, Shizuka-san?” – preguntó Rei al notar la poco frecuente expresión seria de la enfermera.
“No…” – negó la mujer rubia – “Es solo que si lo piensan bien, acabamos de sobrevivir una situación que pensábamos que solo aparecen en películas…”
“. . .” – las chicas quedaron en silencio mientras recordaban todo lo que había sucedido durante estos pocos meses y sinceramente parecía que había sido más tiempo.
“Con eso en la mesa… no creo que suene tan descabellado lo que dice Yuriko-san” – continuó la enfermera rubia.
“Es porque no lo es” – las chicas se sorprendieron cuando escucharon una voz que reconocieron de inmediato – “¡¿Cloud/-kun?!”
La silueta del joven rubio entró por la puerta con una expresión seria en su rostro.
Había llegado el momento y no lo iba a negar, él estaba nervioso.
“Como dije, la suposición de Yuriko-san no es errónea” – dijo el rubio – “Estoy a punto de salir de este mundo y dirigirme a otro”
“. . .” – las chicas quedaron en silencio mientras se mordían los labios.
“Pero… supongo que hay más…” – dijo Saeko mientras miraba al chico que tanto amaba y que la había aceptado como ella era realmente – “Si no fuera así, entonces no te habrías relacionados con nosotras…”
“Puedo ser un bastardo que solo quería pasar el tiempo con ustedes” – respondió Cloud mientras le giraba los ojos.
“No lo eres” – negó Shizuka con una sonrisa – “Si lo fueras, no estaríamos preocupadas como estamos ahora”
“. . .” – Cloud se quedó en silencio mientras soltaba un suspiro – “Es correcto… hay algo más…”
“?” – las chicas lo miraron con curiosidad mientras esperaban la respuesta del chico.
“Y es simple… puedo hacer que ustedes me acompañen” – el rubio solo lanzó la bomba.
Las chicas tenían los ojos abiertos por tales palabras. Ellas nunca pensaron que el chico diría algo tan loco.
“Tengo esta expresión en mi rostro porque no sabía como ustedes lo tomarían” – continuó el joven rubio – “Porque no se cuanto tiempo me tomará poder volver a este mundo”
“. . .” – las chicas quedaron en silencio mientras escuchaban cada palabra del rubio.
“Para que me puedan acompañar, tengo que ċumplir ciertos requisitos” – dijo Cloud – “Por ejemplo Miku-chan… para poder hacer que me acompañes, tengo que ayudarte a superar tu trauma”
“!” – la chicas se sorprendió pero rápidamente su expresión cambió a una triste.
“Se lo que estás pensando, pero no es cierto” – negó el rubio – “Esas condiciones solo aparecieron porque nuestra relación se profundizó, no porque ya estaban desde el principio”
“Yo no puedo controlar las emociones humanas, tampoco los gustos de los demás” – Cloud continuó hablando – “Es por eso que cada reclutamiento es único”
“¿Entonces no estuviste obligado a tomarnos?” – preguntó Miku con una expresión llena de esperanza – “¿No somos solo parte de tu misión?”
“No” – negó el chico – “Mi misión solo era ayudarlas a sobrevivir a ustedes, Takashi y Kohta, todo lo que sucediera fuera de eso, eran mis decisiones propias”
“¿Por qué nosotros?” – preguntó Rei con el ceño fruncido.
“Pueden tomarlo como si este mundo fuera una película y ustedes son los ‘protagonistas’…” – respondió el rubio con el ceño fruncido – “Mi misión era proteger a Takashi, Kohta, Saya, Rei, Saeko y Shizuka-chan…”
“¿Qué hubiera pasado con nosotras?” – preguntó Kyoko aunque más o menos podía deducir la respuesta.
“Muertas” – respondió el rubio con seriedad – “Si yo no hubiera interferido, Kyoko-san hubiera muerto cuando el Profesor de Educación Física la iba a atacar, Miku habría estado con el grupo de Shido junto a Airi y bueno, ya saben que habría sucedido”
“!” – Miku solo tembló con el miedo mientras pensaba en el posible futuro donde el rubio no existiera para salvarla de la violación de su tío.
“Yuriko-san hubiera muerto con Souichiro-san en la mansión Takagi mientras los chicos escapaban” – continuó el rubio – “Y finalmente Rika-san… sinceramente estarías en destino desconocido”
“Pensé que lo sabrías todo” – dijo la mencionada As del Cuerpo de Francotiradores.
“No lo sé todo” – negó el rubio – “Solo sé lo que sé”[1]
“. . .” – las chicas quedaron en silencio mientras digerían toda la información que el rubio les estaba dando.
Si bien sonaba extraño, de alguna forma todo encajaba bien. Si el chico no hubiera intervenido en esos momentos, todo habría cambiado para peor.
“Por cierto, Alice-chan y Zeke hubieran terminado en el grupo… pero el precio sería demasiado grande, ya que la pequeña tendría que ver la muerte de su padre frente a sus propios ojos” – Cloud dijo esto con frialdad – “Los tipos que estaban dentro de la casa cuando nos encontramos con Alice-chan, le habrían perforado el corazón si yo no hubiera interferido”
Las chicas mordieron sus labios con furia cuando escucharon esto.
La pequeña Alice-chan era un rayo de sol para el grupo. Ella era la que les devolvió la felicidad a todos los niños que habían llegado uno detrás de otro.
Ellas no podían imaginar el como una niña tan dulce terminaría sufriendo tan cruel destino.
“Eso explica el porque hiciste eso en aquel momento” – murmuró Saeko mientras recordaba como el rubio lanzaba un proyectil contra la puerta de esa casa.
“El Karma es una perra” – Cloud solo se encogió de hombros – “Pero volviendo al tema, solo les estoy hablando de todo esto porque la entidad que me moverá a otro mundo me lo permitió”
Cloud había estado toda la noche “hablando” con su Sistema sobre que podía decir y que no, aunque tenía que admitir que estaba sorprendido cuando escuchó que podría prácticamente decirles todo. También le había “preguntado” si podía llevar a más personas que las permitidas y para su sorpresa el Sistema le dio luz verde pero solo por esta vez porque era el tutorial y todo era mucho más flexible.
“Esa entidad suena interesante…” – dijo Saeko con una sonrisa – “Me gustaría conocerlo”
“Lo siento pero no puedes verlo” – negó el rubio – “A menos que…”
“La duda ofende, Danna-sama” – dijo Saeko mientras le daba un beso en los labios – “Es obvio que te acompañaré… ¿A caso no recuerdas lo que te prometí cuando iniciamos nuestra relación?”
“Te seguiré hasta el mismísimo infierno… ¿no es así?” – preguntó el rubio mientras le tomaba de la cintura.
“Correcto” – asintió la campeona de Kendo – “Aunque tengo que admitir que nunca pensé que te seguiría hacia otros mundos”
“Yo también te acompañaré, Cloud-chan” – sonrió Shizuka – “No puedo dejar a mi novio ir solo a otros mundos ¿verdad?”
“Supongo que yo también estoy dentro” – dijo Rika mientras miraba a los dos rubios – “No tengo a nadie fuera de a ustedes dos, sin contar que no puedo dejar a esta cabeza de globo sola… estoy segura de que si lo hago, ella solo causará un desastre”
“¡Mou~!” – Shizuka solo infló sus mejillas en molestia pero aún así corrió a abrazar a su amiga – “Gracias, Rika-chan”
“Ni lo menciones” – sonrió la pelimorada.
“Yo también iré contigo” – dijo Miku con tristeza – “Si tú te vas, no me quedará nada…”
“¿Y tu familia, Miku-chan?” – preguntó Kyoko con sorpresa.
“Muertos…” – murmuró la chica de cabello anaranjado – “Amami me informó que Kaasan estaba desmembrada y Tousan… él se había convertido en una de esas cosas…”
“. . .” – las chicas solo guardaron silencio.
“Es por eso que no me queda nada en este mundo…” – dijo Miku mientras las lágrimas corrían – “Si tu me dejas sola, entonces no podré contener todo el dolor que tengo…”
Cloud le dio una mirada a Saeko para que se separaran y caminó hacia donde la pelinaranja para abrazarla – “Ya te lo dije… siempre estaré a tu lado…”
“Por favor… no me abandones” – lloró la chica mientras abrazaba al rubio.
Cloud no dijo nada, solo la abrazó en silencio mientras esperaba que se calmara.
“Yo… iré contigo” – dijo Kyoko luego de pensarlo un buen tiempo – “Al igual que las demás, no me queda nada en este mundo, sin contar que no creo poder volver a mi vida normal luego de todo esto que pasó…”
Ella no mentiría, estaba un poco incómoda con la situación actual porque sentía que todo volvería a ser un caos, así que luego de pensarlo unos segundos, la idea de iniciar en otro mundo desde 0 no sonaba tan mal, sin contar que seguiría contando con el chico que la protegería sin importar que sucediera.
“Necesito pensarlo…” – murmuró Rei mientras suspiraba con dolor y caminaba fuera de la oficina.
“Kaasan… quiero un tiempo a solas para pensar” – dijo Saya mientras miraba a su madre.
“Tranquila mi princesa…” – sonrió Yuriko – “Yo apoyaré tu decisión sin importar cual sea”
Si era por su hija, ella dejaría su felicidad sin pensarlo dos veces, después de todo, ese era el deber de una madre.
“Gracias…” – dicho eso, ella también caminó hacia la puerta.
“Si les sirve de dato, el tiempo entre dimensiones es diferente al que piensan” – dijo Cloud con calma – “Sin importar cuando tiempo pase en otros lugares, aquí solo pasará un día”
Las chicas se detuvieron unos segundos, para luego volver a retomar sus pasos.
Cloud solo suspiró con pesar al ver como las chicas se retiraban. Aunque era algo normal el pensar las cosas ante una decisión tan crucial como esta, a él le dolía ver la duda en sus ojos.
[1] Referencia a Tsubasa Hanekawa de Monogatari Series.
—–FIN CAP 70——
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